Los dentintas son los únicos profesionales que están autorizados por ley a aplicar y administrar los blanqueamientos dentales.
Actualmente existe una normativa que prohíbe su venta por la peligrosidad que suponen. Actualmente en Internet podemos encontrar múltiples opciones para comprar un blanqueamiento dental a domicilio. Aunque son promocionados prometiendo resultados a partir del segundo o tercer día, la realidad nos demuestra que no es así.
Las tiras de blanqueamiento o cualquier producto relacionado en pro de un blanqueamiento dental, además de estar prohibida su venta en España, solo pueden ser empleados si forman parte de un tratamiento dental prescrito, que se ha puesto en práctica y que se ha supervisado por un dentista.
Los productos blanqueadores que se adquieres por una vía distinta a la legal pueden ser muy peligrosos, tanto para los dientes como para el resto de los tejidos de la cavidad oral.
Los efectos milagrosos de los productos blanqueantes que encontramos por internet, a parte de no tener ninguna validez, pueden perjudicar nuestra salud.
Un blanqueamiento dental es un tratamiento conservador para los clientes, no entraña ningún peligro, pero para poderlo llevar a cabo, exigen unas condiciones de salud oral que úncamente puede determinar un odontólogo/estomatólogo. Por otro lado, hay que tener en cuenta que si se pone en práctica un este tratamiento sobre un tejido oral que presenta una determinada patología podría implicar una serie de riesgos importantes para la salud del paciente.