Cuando valoramos los pro y contras de una ortodoncia, el factor estético suele tener mucho peso. Por ello la ortodoncia invisible es perfecta para quienes se preocupan por lucir una sonrisa ‘transparente’ mientras siguen el tratamiento.
¿EN QUÉ CONSISTE LA ORTODONCIA INVISIBLE?
Se trata de la colocación de férulas o alineadores transparentes. Están fabricados en plástico mediante programas informáticos en 3D que realizan una simulación virtual de la dentadura del paciente, desde que se inicia el tratamiento. Durante el proceso, se van generando nuevos modelados para alcanzar el objetivo deseado. Durante este tratamiento el especialista evaluará en cada periodo el moldeado de la férula para conseguir la evolución marcada al inicio del tratamiento.
Se trata de un método eficaz que se diferencia principalmente del resto el carácter transparente de su férula. Un hecho que permite seguir luciendo una sonrisa natural.
No obstante, existen otra serie de ventajas que convierten la Ortodoncia Invisible en una opción perfecta para llevar a cabo una corrección.
- Al ser una férula transparente fabricada con materiales plásticos, permite que la presencia de ortodoncia sea casi invisible para los demás.
- Es muy cómoda ya que no ocasiona roces, llagas o heridas.
- Al ser removible, se puede retirar en las comidas, por lo que facilita el cepillado de los dientes y por tanto, la higiene dental.
- Adaptarse a una ortodoncia no es fácil. Elegir esta opción reduce los tiempos de adaptación por lo que el tratamiento es más satisfactorio.
- Otra de las ventajas es que la férula de plástico se realiza a medida. Gracias a la tecnología 3D, se reproduce la boca y se proyecta su evolución hasta conseguir el resultado deseado.
- Este tipo de ortodoncia genera menos efectos secundarios al final del tratamiento como gingivitis, manchas en las piezas dentales, caries, etc
CASI PARA TODO
La ortodoncia invisible es un ejemplo más de los avances tecnológicos en materia de Odontología. Esta tecnología nos permite resolver casi cualquier problema de mala posición dental. No obstante, como con todos los tratamientos, exige una labor constante por parte de la persona que los lleva, manteniendo puestos los alineadores al menos unas 20 horas al día.
Como siempre, desde Clínica Dental Martí Riera recomendamos que os pongáis en manos de un especialista en odontología para que valore vuestras necesidades y las características de cada boca para elegir el mejor tratamiento que, a la larga, mejore nuestra salud bucodental.
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